En Abril, Olivia tuvo la fortuna de batir sus propios records personales. Juntas volvimos al norte de Noruega, y buscando nuestro norte, llegamos mucho más arriba de lo que nos hubiéramos imaginado, hasta Svalbard, en pleno ártico.
Allí ambas encontramos la paz de un desierto blanco y helado, donde la belleza es mayúscula como el frío que corta los labios no acostumbrados.
Como adelanto de mis fotos allí, os dejo a Olivia en sus mejores momentos:
Con las casas de colores de Spitsbergen:
En Svalbard, con peligro de osos polares.
En los fiordos, practicando turismo activo en Sognefjord:
En Noruega, Olivia se vuelve más cabra que nunca!
6 respuestas a «Olivia vuelve a Noruega»
¡¡que maravilla!!
biquiños,
¡Qué preciosidad de cabra aventurera y de paisajes!
Es la cabra más grande de todas las cabras con diferencia! que viajera, cuanto mundo!!
Cuantas historias hermosas, tendrá esta cabrita viajera para contarle a sus hijos…Ciudadana del mundo, con alma gallega!!
Fabulosas las fotos Brumita!!
Un beso grandote a las dos :)*
Esta cabra está muy loca!!! Mírala a ella qué feliz!!!
Un abrazo a las dos
🙂
Qué mona siempre Olivia