Para conquistar mi corazón con su aroma de cachorra, para jugar, para hacerme madrugar, para proponerme nuevas actividades, para aprender a ser mi compañera, para hacer crecer esta familia, para colmarme de lametones mañaneros, para ponerme a prueba como educadora, para hacer que me derrita en sus momentos tiernos y para compartir todo lo que tengamos por venir.
Ella es Max Brown y oficialmente declaro que estamos enamoradas. 😉
Nunca podré agradecer suficiente a su papá por hacerla llegar a mí.
Fotografías magistrales por Katreyuk
4 respuestas a «Y entonces llegó ella»
Una preciosidad de amor con unos ojos muy brillantes, casi parlanchines ¡¡ 🙂 Felicidades y a disfrutar bonicas
¡Es un trocito tierno de chocolate con patas, y con unos inmensos ojos azules! No me extraña que caigas rendida a sus cucamonas 🙂
Un beso
Que bomboncito! parece un peluche…me la como a besos!!
Y sí, ahora es parte de la familia, el amor que te dan es incondicional! Ya nos contarás más…
Que la disfruten!
un besote linda
P.D. No se pondrá celosa Olivia? jajaja 🙂
Qué guapa Max,
qué maravilla de cachorro…
Preciosa!