…Sentí la vida fluir por mi cuerpo, estremeciéndome y llegando a emocionarme…
…Tuve ganas de abrazarme y mecerme algún día…
…Adoré a la luna y a su luz azul que cautivan mis sentidos por momentos…
…Disfruté de 40 min. de alguien tan cercano en el alma como alejado en el cuerpo…
…Sentí los efectos de un café tomado por cortesía tras meses de «abstinencia»… y me rei mucho por ello…
…Me tomé 5 min. para respirar antes de perder la paciencia…
…Di un abrazo en la distancia con una parte de mi…
…Me inventé un nuevo cuento loco para dormir…
…Tuve una conversación de hora y media sin que ni me preguntaran cómo estoy yo…
…….y me sentí muy bien al comprobar que no me importaba, sabía lo que esperar…
…Sentí unas ganas increibles de tocar y acariciar la tierra…
Image by Konrad Photography
Fui vida, luz, color, energía, ganas, sonrisa, amor…. y todo esto sucedió en un simple miércoles que pasaba desapercibido en el calendario. Y yo me levanté ignorante de todo aquello… ¿no es magia?